sábado, 23 de junio de 2018

Evangelio de Nuestro Señor Jesucristo: Lc.1, 1-25, 27-68 y 80

Salmo Responsorial
Del salmo 79, 2ac.3c. 15-16. 18-19
R/. Muéstranos tu favor y sálvanos.
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Escúchanos, pastor de tu Pueblo; tú que estás rodeado de querubines, manifiéstate; despierta tu poder y ven a salvarnos. R/.
Señor, Dios de los ejércitos, vuelve tus ojos, mira tú viña y visítala; protege la cepa plantada por tu mano, el renuevo que tú mismo cultivaste. R/.

Carta del Apóstol Pablo a los cristianos de Roma
Rom10, 1-10

"1. Hermanos, el anhelo de mi corazón y mi oración a Dios en favor de ellos es que se salven. 2.Testifico en su favor que tienen celo de Dios, pero no conforme a un pleno conocimiento. 3.Pues desconociendo la justicia de Dios y empeñándose en establecer la suya propia, no se sometieron a la justicia de Dios. 4.Porque el fin de la ley es Cristo, para justificación de todo creyente. 5.En efecto, Moisés escribe acerca de la justicia que nace de la ley: Quien la cumpla, vivirá por ella. 6.Mas la justicia que viene de la fe dice así: No digas en tu corazón ¿quién subirá al cielo?, es decir: para hacer bajar a Cristo; 7.o bien: ¿quién bajará al abismo?, es decir: para hacer subir a Cristo de entre los muertos. 8.Entonces, ¿qué dice? Cerca de ti está la palabra: en tu boca y en tu corazón, es decir, la palabra de la fe que nosotros proclamamos. 9.Porque, si confiesas con tu boca que Jesús es Señor y crees en tu corazón que Dios le resucitó de entre los muertos, serás salvo. 10.Pues con el corazón se cree para conseguir la justicia, y con la boca se confiesa para conseguir la salvación." 

Romanos, 10 - Bíblia Católica Online


Continuamos con el Salmo. 
Respondemos: R/. Muéstranos tu favor y sálvanos.

Que tu diestra defienda al que elegiste, al hombre que has fortalecido. Ya no nos alejaremos de ti; consérvanos la vida y alabaremos tu poder. R/.

HERMANOS QUE JESÚS SEA BENDITO Y ALABADO



Evangelio de Nuestro Señor Jesucristo: Lc.1, 1-25, 27-68 y 80

"1. Puesto que muchos han intentado narrar ordenadamente las cosas que se han verificado entre nosotros, 2.tal como nos las han transmitido los que desde el principio fueron testigos oculares y servidores de la Palabra, 3.he decidido yo también, después de haber investigado diligentemente todo desde los orígenes, escribírtelo por su orden, ilustre Teófilo, 4.para que conozcas la solidez de las enseñanzas que has recibido. 5.Hubo en los días de Herodes, rey de Judea, un sacerdote, llamado Zacarías, del grupo de Abías, casado con una mujer descendiente de Aarón, que se llamaba Isabel; 6.los dos eran justos ante Dios, y caminaban sin tacha en todos los mandamientos y preceptos del Señor. 7.No tenían hijos, porque Isabel era estéril, y los dos de avanzada edad. 8.Sucedió que, mientras oficiaba delante de Dios, en el turno de su grupo, 9.le tocó en suerte, según el uso del servicio sacerdotal, entrar en el Santuario del Señor para quemar el incienso. 10.Toda la multitud del pueblo estaba fuera en oración, a la hora del incienso. 11.Se le apareció el Angel del Señor, de pie, a la derecha del altar del incienso. 12.Al verle Zacarías, se turbó, y el temor se apoderó de él. 13.El ángel le dijo: «No temas, Zacarías, porque tu petición ha sido escuchada; Isabel, tu mujer, te dará a luz un hijo, a quien pondrás por nombre Juan; 14.será para ti gozo y alegría, y muchos se gozarán en su nacimiento, 15.porque será grande ante el Señor; no beberá vino ni licor; estará lleno de Espíritu Santo ya desde el seno de su madre, 16.y a muchos de los hijos de Israel, les convertirá al Señor su Dios, 17.e irá delante de él con el espíritu y el poder de Elías, para hacer volver los corazones de los padres a los hijos, y a los rebeldes a la prudencia de los justos, para preparar al Señor un pueblo bien dispuesto.» 18.Zacarías dijo al ángel: «¿En qué lo conoceré? Porque yo soy viejo y mi mujer avanzada en edad.» 19.El ángel le respondió: «Yo soy Gabriel, el que está delante de Dios, y he sido enviado para hablarte y anunciarte esta buena nueva. 20.Mira, te vas a quedar mudo y no podrás hablar hasta el día en que sucedan estas cosas, porque no diste crédito a mis palabras, las cuales se cumplirán a su tiempo.» 21.El pueblo estaba esperando a Zacarías y se extrañaban de su demora en el Santuario. 22.Cuando salió, no podía hablarles, y comprendieron que había tenido una visión en el Santuario; les hablabla por señas, y permaneció mudo. 23.Y sucedió que cuando se cumplieron los días de su servicio, se fue a su casa. 24.Días después, concibió su mujer Isabel; y se mantuvo oculta durante cinco meses 25.diciendo: «Esto es lo que ha hecho por mí el Señor en los días en que se dignó quitar mi oprobio entre los hombres.» 

"27a una virgen desposada con un hombre llamado José, de la casa de David; el nombre de la virgen era María. 28.Y entrando, le dijo: «Alégrate, llena de gracia, el Señor está contigo.» 29.Ella se conturbó por estas palabras, y discurría qué significaría aquel saludo. 30.El ángel le dijo: «No temas, María, porque has hallado gracia delante de Dios; 31.vas a concebir en el seno y vas a dar a luz un hijo, a quien pondrás por nombre Jesús. 32.El será grande y será llamado Hijo del Altísimo, y el Señor Dios le dará el trono de David, su padre; 33.reinará sobre la casa de Jacob por los siglos y su reino no tendrá fin.» 34.María respondió al ángel: «¿Cómo será esto, puesto que no conozco varón?» 35.El ángel le respondió: «El Espíritu Santo vendrá sobre ti y el poder del Altísimo te cubrirá con su sombra; por eso el que ha de nacer será santo y será llamado Hijo de Dios. 36.Mira, también Isabel, tu pariente, ha concebido un hijo en su vejez, y este es ya el sexto mes de aquella que llamaban estéril, 37.porque ninguna cosa es imposible para Dios.» 38.Dijo María: «He aquí la esclava del Señor; hágase en mí según tu palabra.» Y el ángel dejándola se fue. 39.En aquellos días, se levantó María y se fue con prontitud a la región montañosa, a una ciudad de Judá; 40.entró en casa de Zacarías y saludó a Isabel. 41.Y sucedió que, en cuanto oyó Isabel el saludo de María, saltó de gozo el niño en su seno, e Isabel quedó llena de Espíritu Santo; 42.y exclamando con gran voz, dijo: «Bendita tú entre las mujeres y bendito el fruto de tu seno; 43.y ¿de dónde a mí que la madre de mi Señor venga a mí? 44.Porque, apenas llegó a mis oídos la voz de tu saludo, saltó de gozo el niño en mi seno. 45.¡Feliz la que ha creído que se cumplirían las cosas que le fueron dichas de parte del Señor!» 46.Y dijo María: «Engrandece mi alma al Señor 47.y mi espíritu se alegra en Dios mi salvador 48.porque ha puesto los ojos en la humildad de su esclava, por eso desde ahora todas las generaciones me llamarán bienaventurada, 49.porque ha hecho en mi favor maravillas el Poderoso, Santo es su nombre 50.y su misericordia alcanza de generación en generación a los que le temen. 51.Desplegó la fuerza de su brazo, dispersó a los que son soberbios en su propio corazón. 52.Derribó a los potentados de sus tronos y exaltó a los humildes. 53.A los hambrientos colmó de bienes y despidió a los ricos sin nada. 54.Acogió a Israel, su siervo, acordándose de la misericordia 55.- como había anunciado a nuestros padres - en favor de Abraham y de su linaje por los siglos.» 56.María permanceció con ella unos tres meses, y se volvió a su casa. 57.Se le cumplió a Isabel el tiempo de dar a luz, y tuvo un hijo. 58.Oyeron sus vecinos y parientes que el Señor le había hecho gran misericordia, y se congratulaban con ella. 59.Y sucedió que al octavo día fueron a circuncidar al niño, y querían ponerle el nombre de su padre, Zacarías, 60.pero su madre, tomando la palabra, dijo: «No; se ha de llamar Juan.» 61.Le decían: «No hay nadie en tu parentela que tenga ese nombre.» 62.Y preguntaban por señas a su padre cómo quería que se le llamase. 63.El pidió una tablilla y escribió: «Juan es su nombre.» Y todos quedaron admirados. 64.Y al punto se abrió su boca y su lengua, y hablaba bendiciendo a Dios. 65.Invadió el temor a todos sus vecinos, y en toda la montaña de Judea se comentaban todas estas cosas; 66.todos los que las oían las grababan en su corazón, diciendo: «Pues ¿qué será este niño?» Porque, en efecto, la mano del Señor estaba con él. 67.Zacarías, su padre, quedó lleno de Espíritu Santo, y profetizó diciendo: 68.«Bendito el Señor Dios de Israel porque ha visitado y redimido a su pueblo." 

"80 El niño crecía y su espíritu se fortalecía; vivió en los desiertos hasta el día de su manifestación a Israel." 
Lucas, 1 - Bíblia Católica Online

PALABRA DE DIOS
Oraciones de los fieles

1. Para que todos los fieles se dispongan a recibir a Cristo conservando sus palabras en el corazón.   Roguemos al Señor.

2. Para que aquellos hermanos nuestros que han abandonado las prácticas cristianas descubran la buena noticia del Evangelio, no como un rayo fugaz en la noche, sino como luz permanente que ilumina y alegra toda la vida. Roguemos al Señor.

3. Para que Esta Celebración Eucarística nos alejen las tinieblas de quienes viven sumergidos en dudas e incertidumbres. Roguemos al Señor

4. Para que colmen los deseos de quienes se sienten descorazonados y tristes, roguemos al Señor.