Salmo: Respondemos: Todo lo que brota sobre la tierra, bendiga al Señor.
Montañas y colinas, bendigan al Señor,
Manantiales, bendigan al Señor,
¡alábenlo y glorifíquenlo eternamente! R
Mares y ríos, bendigan al Señor,
Cetáceos y todo lo que se mueve en las aguas, bendigan al Señor,
¡alábenlo y glorifíquenlo eternamente! R
Carta del apóstol Pablo a los cristianos de Efeso
Ef.5,8-19
"8 En otro tiempo ustedes eran tinieblas, pero ahora son luz en el Señor. Pórtense como hijos de la luz, 9.con bondad, con justicia y según la verdad, pues ésos son los frutos de la luz. 10.Busquen lo que agrada al Señor. 11.No tomen parte en las obras de las tinieblas, donde no hay nada que cosechar; al contrario, denúncienlas. 12.Sólo decir lo que esa gente hace a escondidas da vergüenza; 13.pero al ser denunciado por la luz se vuelve claro, y lo que se ha aclarado llegará incluso a ser luz. 14.Por eso se dice: «Despierta, tú que duermes, levántate de entre los muertos y la luz de Cristo brillará sobre ti.» 15.Examinen, pues, con mucho esmero su conducta. No anden como tontos, sino como hombres responsables. 16.Aprovechen el momento presente, porque estos tiempos son malos. 17.Por tanto, no se dejen estar, sino traten de comprender cuál es la voluntad del Señor. 18.No se emborrachen, pues el vino lleva al libertinaje; más bien llénense del Espíritu. 19.Intercambien salmos, himnos y cánticos espirituales. Que el Señor pueda oír el canto y la música de sus corazones."
Carta a los Efesios, 5 - Bíblia Católica Online
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Continuamos con el Salmo.
Respondemos: Todo lo que brota sobre la tierra, bendiga al Señor.
Todas las aves del cielo, bendigan al Señor,
¡alábenlo y glorifíquenlo eternamente! R
HERMANOS: QUE JESÚS SEA BENDITO Y ALABADO
Evangelio de Nuestro Sr. Jesucristo
San Lucas 18, 35-43
El ciego de Jericó
"Al acercarse a Jesús de Jericó, estaba un ciego sentado al borde del camino, pidiendo limosnas. 36 . Al oír el ruido de la multitud que pasaba, preguntó qué había. 37 . Le respondieron: Es Jesús de Nazaret, que pasa. 38 . Él entonces exclamó: ¡Jesús, hijo de David, ten piedad de mí! 39 . Los que venían en el frente le reprendían rudamente para que se callara. Pero él gritaba aún más fuerte: Hijo de David, ten piedad de mí. 40 . Jesús se detuvo y mandó que se lo trajeran. Al acercarse a él, le preguntó: 41 . ¿Qué quieres que te haga? Y él respondió: Señor, que yo vea. 42 . Jesús le dijo: ¡Mira! Tu fe te salvó. 43 . Y inmediatamente se quedó viendo y seguía a Jesús, glorificando a Dios. Presenciando esto, todo el pueblo dio gloria a Dios."
PALABRA DE DIOS
ORACIONES DE LOS FIELES
A cada intención respondemos: Roguemos al Señor.
2.- Por los enfermos y los necesitados de nuestra comunidad y del mundo entero, para que tengan la suerte de encontrase con Nuestro Señor Jesús, y sientan su fuerza liberadora en los gestos de tantas personas que les acompañan. ROGUEMOS AL SEÑOR.
3.- Por todos los voluntarios que trabajan en los diferentes servicios de Caridad de la Pastoral de la Salud, en la atención a los grupos más desfavorecidos, mostrándoles la Buena Nueva del Reino desde la atención y la respuesta a sus situaciones. ROGUEMOS AL SEÑOR.
4.- Por los que estamos aquí reunidos y nuestra comunidad, para que, como seguidores de Jesucristo, seamos auténticos testigos del Evangelio en los ambientes en los que nos movemos y seamos Esperanza para todos ellos. ROGUEMOS AL SEÑOR.
Reflexión
Al acercarse a Jericó se encuentra un ciego que pedía limosna. Se sorprende al escuchar tanto ruido y se interesa por lo que pasa. Alguien le dice: "Jesús, el de Nazaret, está pasando por ahí", y el ciego comienza a gritar: "Hijo de David, ten compasión de mí". Con esto consiguió que algunos se molestaran con sus gritos e intentaron que se callara. Pero insistía más. Jesús se detiene y ordena que le traigan al ciego. Le pregunta: ¿Qué quieres que haga por ti? "Señor, que vea", respondió. La reacción de Jesús es inmediata: "Recobra la vista, tu fe te ha salvado". El ciego logra por su fe lo que Cristo ofrece por su caridad.
Cuánto nos enseña el Señor en un solo hecho. En este pasaje se muestra una persona que busca la solución a su problema físico. Solución que pasa por la fe. Este hombre probablemente nunca había visto al Señor; habría oído mucho sobre él. Esto le bastó para creer que Jesús era hijo de David y también para saber que Jesucristo tenía un corazón tan grande que siempre se compadecía de aquellos que sufrían. Cristo nunca coarta la libertad, sino que respeta profundamente a cada ser humano.
Lo hermoso del pasaje y lo que nos puede ayudar a reflexionar más es la actitud del ciego una vez que deja de serlo, y es que "sigue a Jesús glorificando a Dios".(1)
(1)http://es.catholic.net/op/articulos/10443/cat/337/jesus-hijo-de-david-ten-compasion-de-mi.html